Roses, la bella localidad de la Costa Brava, ofrece numerosas actividades que realizar por tierra, mar y aire. Pero no se queda ahí, ya que también se podrá visitar lo que esconden sus túneles bajo tierra. En 2012, durante unas obras de reurbanización de la plaza de Prim de Roses se halló un refugio antiaéreo creado durante Guerra Civil española para proteger a los ciudadanos de los bombardeos. Tras años de estudio para conocer su estado y valor el ayuntamiento de la localidad ha decidido realizar visitas guiadas para todo aquel que quiera conocer su historia.
Este recorrido guiado se realizará tras algunas remodelaciones mínimas dentro de los túneles subterráneos, instalando zonas nuevas de iluminación y sistemas de audio que harán más envolventes las visitas. Estos recorridos se realizan en grupos reducidos acompañados de un guía especializado, que lleva a la gente que se adentre en los túneles a conocer años de historia escondida bajo tierra. El acceso principal del refugio antiáereo se encuentra en la plaza de la Pau y la salida puede hallarse en la calle Capitán Ariza.
Contexto del refugio en la Guerra Civil
La Guerra Civil española comenzó en 1936. La localidad de Roses en esa época era pequeña, con tan solo unos 3000 habitantes. Durante los primeros meses de la guerra sus gentes pudieron vivir en relativa paz hasta que a su costa llegó el gran buque Canarias. Este inició un bombardeo que terminó por destrozar toda la primera línea de costa de Roses. Con este bombardeo se dice que se buscaba que la frontera de Barcelona contara con menos tropas al acudir estas a ayudar a los habitantes de Roses.
Durante 1937 se acordó construir cinco refugios subterráneos por toda la localidad, aunque en la actualidad solo se ha podido conservar uno. La construcción de los refugios se costeó mediante impuestos por la compra del pan. Eudald Francisco Badosa fue uno de los testigos de aquella época, que con solo 4 años vivió lo que era tener que correr a refugiarse bajo tierra. El hombre cuenta como en el refugio hacia mucho frío y había humedad, por lo que solían forrar sus zapatos y ropaje con paja. Además, existían muchas filtraciones de agua, lo que encharcaba los suelos. El hombre también cuenta la anécdota de una anciana que siempre mandaba callar a todos los que ocupaban el túnel, indicando que las paredes tenían oídos en todas partes y que podían estar espiándoles. Roses sufrió en total cinco bombardeos durante el transcurso de la Guerra Civil española entre los años 1936- 1939.
Dentro del túnel
Esta trinchera antibombardeos fue construida utilizando un desnivel natural que existía en el terreno entre las calles Josep Sabater, Trinitat y Capità Ariza. Aunque ahora solo dispone de dos entradas, antiguamente el refugio contaba con tres. La principal y más utilizada, puerta de acceso al recorrido es la ubicada bajo las escaleras que conducen a la Plaza de la Pau. Otro de los accesos se encontraba en la Puajada de l'Escorxador mientras que en el suelo de la calle Girona existía un respiradero por el que la gente también podía acceder al interior del refugio.
Los tres espacios el túnel
La parte más importante de la visita es el interior del refugio, que cuenta con 100 metros de longitud, un metro de ancho y 1,90 metros de altura, lo que le hace un sitio bastante reducido. Asimismo, después de la adecuación del túnel, se pueden distinguir tres espacios diferenciados:
- El Refugio, que intenta mostrar como fue la protección del lugar y la sensación de incertidumbre de todos los que la habitaban.
- La Fachada de la Guerra, donde se muestran los horrores vividos durante la época de la Guerra Civil.
- La Fachada de la Paz, donde se ha querido simbolizar la esperanza y sueños de prosperar en el futuro.
Detalles de la visita
A continuación se recogen los siguientes datos de interés para todo aquel que quiera visitar el refugio antiaéreo de Roses:
- Durante el verano se han establecido unos días en los que los ciudadanos pueden acudir a visitar los refugios.
- Los precios para la visitan son de 5 euros para adultos y 3 euros para los niños.
- Los menores de 6 años no pueden acceder al interior del túnel.
- Las entradas pueden adquirirse en la Oficina de Turismo ubicada en la Avenida de la Rhode 77.
- La visita no está recomendada para personas que sufran problemas de claustrofobia al ser un túnel estrecho bajo tierra.