5 destinos de la España interior para visitar en verano

Aunque las playas de Menorca o de Fuerteventura son dos de las opciones favoritas cuando se planean las vacaciones de verano en España, lo cierto es que muchos llegan a olvidar la magia que encierra la propia península, especialmente su interior más salvaje y desconocido. Organizar un viaje a un paraje rural o de montaña, en el que su historia, tradición o entorno artístico son los protagonistas, también es una estupenda opción cuando decidimos disfrutar de unos días en los que reconectar con nosotros mismos, alejados de la rutina del día a día y sin ninguna preocupación más allá de aprovechar al máximo el tiempo, construyendo nuevos recuerdos. Descubre a continuación algunos de los mejores lugares del interior de España para visitar en verano, en los que el turismo y el descanso van dados de la mano para regresar a casa con las pilas cargadas y sin la sensación de haber preferido optar por un destino de de sol y playa.

1El Maestrazgo

Teruel existe y su importancia en la historia se hace presente en la comarca de El Maestrazgo, que recibe este nombre porque durante siglos el territorio estuvo bajo el dominio de caballeros templarios y de las órdenes de San Juan o Montesa. Situada al este de esta provincia aragonesa, naturaleza, cultura, arte y gastronomía se entremezclan en los pueblos que conforman este destino de interior en el que se puede disfrutar de unas inolvidables vacaciones estivales gracias a la multitud de opciones que ofrece a sus turistas. Además, el verano es precisamente la mejor época para conocer todos los secretos de El Maestrazgo, especialmente desde finales de junio y hasta principios de septiembre, ya que es el momento en el que se dan las mejores temperaturas del año para descubrir toda la geografía de este rincón de España.

Dinosaurios y las Grutas de Cristal

Huellas de dinosaurios encontradas en Castellote, conservadas en su famoso Bosque Pétreo, ya demuestran que El Maestrazgo ha sido lugar de interés desde el comienzo de los tiempos. De entre las diferentes poblaciones que componen esta comarca de Teruel, ningún visitante puede dejar tampoco de conocer Cantavieja, reconocido como uno de los pueblos más bonitos de España y cuyo casco histórico cuenta con importantes muestras de arte gótico y barroco. La Iglesuela del Cid también merece una visita para admirar su coqueto ambiente medieval y renacentista y seguir los pasos de este mítico personaje de la historia española.

Cantavieja es uno de los pueblos más pintorescos de El Maestrazgo. Fuente: Cantavieja Turismo

Por su parte, en la localidad de Molinos los apasionados de la naturaleza disfrutan de las Grutas de Cristal, una de las cuevas más espectaculares de Aragón. Pitarque es también otro de los pueblos imprescindibles de El Maestrazgo y donde se produce el nacimiento de este mismo río de aguas cristalinas que emanan desde un bucólico entorno reconocido como Monumento Natural. Una vez el hambre comience a apretar, Tronchón es la parada gastronómica en la comarca, al ser el principal centro de elaboración de un delicioso queso que es también el souvenir perfecto para amigos y familiares.

2Montaña Palentina

En los últimos años, Palencia por fin está abandonando el apelativo de 'Bella desconocida' heredado de la majestuosa catedral gótica de su capital para convertirse verdaderamente en la 'Bella reconocida'. Al norte de esta hermosa provincia de la comunidad autónoma de Castilla y León nos encontramos con la comarca de la Montaña Palentina, conocida por ser uno de los ejes fundamentales de concentración arte románico y que ha querido optar a la declaración de Patrimonio de la Humanidad. Por tanto, los amantes del arte y la historia encuentran en este lugar un increíble destino para unas vacaciones por el interior de España en verano, estación propicia para visitar esta región al contar con temperaturas mucho más cálidas que las de los fríos meses de otoño e invierno.

Lo que esconde la Montaña de Palencia

Recorriendo en coche la Montaña Palentina, los turistas se quedan anonadados con sus paisajes, ya que no esperan encontrar una explosión de naturaleza salvaje, verde y montañosa, que contrasta claramente con las tradicionales postales áridas y secas que reflejan los campos castellanos durante el período estival. Por ejemplo, cabe señalar que en esta comarca pervive el Hayedo de Peña Redonda, así como varios Parques Naturales como el de Las Tuerces, con curiosas formaciones fruto de las erosiones de la roca caliza, o el de Covalagua, donde el agua brota a borbotones.

Claustro del Monasterio de San Andrés del Arroyo. Fuente: Palencia Turismo

El verdadero emblema cultural de la Montaña Palentina, y motivo que lleva a la gran mayoría de viajeros a desplazarse hasta ella, es el arte románico. De entre sus numerosos monumentos, sobresale especialmente el Monasterio de San Andrés del Arroyo, cuyo origen se remonta al siglo XII y cuyo claustro es una de las grandes joyas de este movimiento artístico, así como la Iglesia de San Juan Bautista, en Moarves de Ojeda, cuya portada está coronada por uno de los más bellos Pantocrátor pétreos de toda España. Menos conocida, pero también de obligada visita, es la Iglesia de Santa María la Real, en Valberzoso, cuyo ábside aún conserva unos impresionantes frescos románicos dignos de admirar.

3Las Merindades

Otro de los lugares que proponemos para visitar en el interior de España en verano es Las Merindades. Se trata de una región situada al norte de la provincia de Burgos y de la que muchos viajeros llegan de decir que parece sacada de un verdadero cuento. Pueblos medievales, impresionantes juegos de aguas y abruptos paisajes verdes y montañosos son algunas de las maravillas que conforman este idílico destino para unas vacaciones estivales. Los meses de junio a agosto son ideales para recorrer esta comarca burgalesa, ya que las temperaturas son muy cálidas, alejadas del frío del invierno u otoño, y los días son más largos para aprovechar el máximo tiempo al aire libre, descubriendo todos sus secretos.

Naturaleza, arte y patrimonio

Los seguidores del turismo activo y la naturaleza encuentran en Las Merindades el destino perfecto. Recorrer el Parque Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón es uno de los planes que no pueden faltar, sobre todo para quienes les guste hacer senderismo. La vegetación salvaje y el paisaje erosionado por el avance del río Ebro son las señas de identidad de este entorno que deja boquiabiertos a todo el que lo contempla, especialmente desde el mirador del cañón. Del mismo modo, la Cascada de Pedrosa de Tobalina es otro imprescindible, todo un fenómeno que supera los 12 metros y cuyas aguas, procedentes del río Jerea, refrescan a los viajeros más veraniegos.

Frías es uno de los pueblos con más encanto de Burgos. Fuente: Las Merindades

La parte más cultural de Las Merindades se centra en la visita a algunos de sus históricos pueblos, como Frías. Su castillo se encuentra situado en un alto rocoso y domina todo el casco urbano, siendo una de las grandes postales de la comarca. Asimismo, las ruinas del Monasterio de Santa María de Rioseco no deben faltar tampoco en el recorrido, como tampoco hay que perder de vista la Ermita de San Bernabé, excavada en la roca dentro del Monumento Natural de Ojo Guareña y uno de los sitios más visitados de toda esta región del norte de Burgos.

4La Vera

La Vera es una de las zonas con más encanto de Extremadura. Situada en la vertiente sur de la Sierra de Gredos, presenta un clima cálido en verano con temperaturas que no sobrepasan los 30ºC de media en julio, el mes más caluroso de todos. Sin embargo, es una buena época para planificar una visita al ser la temporada perfecta para disfrutar al máximo de sus muchas piscinas o pozas naturales, destacando la Garganta de Alardos, en Madrigal de la Vera, o la Garganta del Diablo, cerca de Villanueva de la Vera, esta última enclavada en un entorno natural excepcional.

El Monasterio de Yuste es una de las principales paradas culturales en Extremadura

El Monasterio de Yuste

Además del refrescante plan anterior, La Vera es uno de los mejores destinos del interior de España para los viajeros que busquen ambientes rurales en los que desconectar rodeados de naturaleza y tranquilidad. De hecho, fue el lugar escogido por Carlos I de España para pasar sus últimos días después de haber delegado sus obligaciones de gobierno en 1556. Precisamente, algo que no puede faltar cuando se recorre esta comarca extremeña es una visita al Monasterio de Yuste, donde este poderoso Emperador ordenó construirse el pequeño palacio en el que falleció.

Jarandilla de La Vera

Sin embargo, el Monasterio de Yuste no es la única parada cultural obligatoria que hay que hacer en La Vera. Todos sus pueblos merecen la pena por el patrimonio artístico e histórico que atesoran, con joyas que abarcan desde la época romana, pasando por el período medieval y el Renacimiento; de entre estas localidades, cabe destacar algunas de ellos, como Jarandilla de la Vera. Allí se encuentra el Castillo-Palacio de los Condes de Oropesa, todo un monumento del siglo XV que actualmente es uno de los Paradores de Turismo de España.

5La Alcarria

Una de las comarcas más famosas de España y que ha llegado a inspirar a escritores de la talla de Camilo José Cela es La Alcarria. Abarca parte de las provincias de Guadalajara y Cuenca y el sureste de la Comunidad de Madrid, y está formada por pueblos tan conocidos como Pastrana, la villa ducal donde pasó sus últimos días la Princesa de Éboli, personaje fundamental durante el reinado de Felipe II. Sin embargo, esta no es la única localidad que hay que visitar en un viaje a La Alcarria.

Las cascadas de agua de Trillo son parte de los atractivos de La Alcarria. Fuente: Turismo Castilla-La Mancha

Torija y su castillo

Torija es otra de las villas que te esperan en La Alcarria. En este lugar se puede ver un castillo del siglo XV que un día estuvo en manos de los templarios, con la magia que ello conlleva. Hoy en día, la torre del homenaje de este portentoso monumento alberga el Museo del Viaje a la Alcarria, todo un homenaje a la obra de Cela y a la propia región.

Brihuega y sus campos de lavanda

Aunque cualquier época del año es buena para organizar una escapada rural a La Alcarria, lo cierto es que el verano es la mejor de todas. De hecho, es el viaje perfecto por el interior de España para dar paso a esta cálida estación, ya que durante el mes de julio sus llanuras se convierten en un auténtico jardín en el que poder gozar de la belleza de sus campos de girasoles o del aroma de la lavanda.

La floración de la lavanda convierte e Brihuega en destino obligado cada julio

Precisamente, Brihuega es uno de los pueblos más visitados durante la floración de esta última y aromática planta, un lugar en el que también dejarse embelesar por su patrimonio cultural. El casco histórico ha sido reconocido como Conjunto Histórico-Artístico y entre sus monumentos sobresalen la iglesia románica de San Felipe y su castillo, una de las grandes fortalezas de Guadalajara.

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Trillo y las cascadas del río Cifuentes

Para todos aquellos que buscan destinos refrescantes en verano, La Alcarria también es uno de ellos a pesar de encontrarse en el interior de España, y pueblos como Trillo así lo demuestran. Se trata de una localidad en la que el agua emana en cada rincón, donde sus mayores monumentos son las cascadas del río Cifuentes que discurren por sus propias calles y que alegran a los turistas que se encuentran con ellas. Además, es también famoso por las propiedades medicinales de sus aguas termales, hasta por las que llegó a interesarse el Rey Carlos III, quien ordenó construir un balneario que es actualmente uno de los mejores hoteles en los que alojarse cuando se visita esta impresionante comarca.